Un trashumante solitario viaja con su caballo por desiertos salvajes en busca de venganza y redención. Con él lleva un rifle, semillas de calabaza y una vasija de cuero cargada de agua. Atribulado por las huellas oscuras de su vida anterior, el héroe de Dios duerme en la piedra peregrina aniquilando bandoleros errantes y tiene encuentros fortuitos con nómades abúlicos diezmados por una impiadosa secta ambulante. Aunque no quiera volver sobre sus pasos, el territorio y estos encuentros se fundirán uno sobre los otros en una serie de aventuras hasta precipitarlo en un vórtice de perdición y reconocimiento del que sólo podrá salir con el advenimiento del fin de los tiempos. En la línea del Cormac McCarthy de Meridiano de sangre, o la narrativa apocalíptica de J. G. Ballard, Mike Wilson despliega en esta novela alucinada un universo cuyo lenguaje es absolutamente propio.