El gran Gatsby es un retrato de la era del jazz que captura el espíritu de la generación de Scott Fitzgerald y le concede un trono permanente en el Olimpo de la literatura estadounidense. El millonario hecho a sí mismo, Jay Gatsby, personaliza una de las obsesiones del autor y de la sociedad de su país: la combinación de dinero, ambición y lujuria como promesa de nuevos comienzos. Una extraordinaria fábula —y como tal, no exenta de moraleja— sobre el sueño americano.
«El tenía una de las cualidades más raras en la literatura: encanto, encanto como Keats lo había tenido. ¿Y quién lo posee hoy día?»