Ya no habitamos la tierra y el cielo, sino Google Earth y la nube. La información domina nuestro entorno de vida, y las cosas palpables pasan cada vez más a un segundo plano. El mundo como esfera de información se superpone al mundo como constelación de cosas, y esa transición modifica sustancialmente nuestra percepción y relación con el mundo. Byung-Chul Han analiza con brillantez esta deriva, defiende la magia de las cosas y reflexiona sobre lo que se pierde en el ruido de la información.