Al leer el libro《Cartas a un joven poeta》de Rainer Maria Rilke (editorial Nórdica e ilustrado por Ignasi Blanch) nos encontramos con la ilustración de un hombre que va desnudándose, capa por capa, página por página, hasta llegar a mostrar su alma. Esto es sin duda una interpretación maravillosa de qué significa escribir poesía.
Un poeta es un artista que transmite desde su mundo propio, es introspectivo y busca en su interior, en su soledad su arte y su voz. Así, una vez que encuentra su registro lo traspasa a sus lectores a partir de un lenguaje justo, a veces escaso, a veces grandilocuente pero siempre con un ritmo y una cadencia especial. Por lo tanto, el poeta no es otro que quien plasma la belleza por medio de la palabra, de sus versos, despertando emociones, sensaciones e ideas en sus lectores.
De esta forma, cuando leemos poesía debemos tomar una actitud que nos permita dejar de lado nuestros prejuicios, al igual que al enfrentar cualquier nueva lectura, pero en este caso tenemos que ir un paso más adelante y hacernos a un lado, dejando en la medida de lo posible nuestros intereses y sesgos, enfocándonos en “sentir” cada palabra, cada frase, cada verso y cada poema. Recién ahí veremos más allá de las palabras.
Lo que buscamos al leer poesía es que el poema nos haga algo y no hacer algo con él, tal como lo establece CS Lewis en su libro 《La experiencia de leer》, debemos estar abiertos a recibir. Una vez que hemos leído un poema, lo tenemos que dejar decantar, quizás releerlo en voz alta para percibir su musicalidad. Cuando leemos poesía es el momento de dejar la mente en blanco y zambullirnos en la lectura, como si estuviésemos meditando, concentrarnos en las palabras cada vez más profundamente para ser capaces recibir ese mensaje cantado.
Entonces ¿cómo nos adentramos en la lectura de la poesía? bueno, para mi no hay una respuesta correcta, porque esto no es una ciencia exacta, pero lo que sí tengo claro es que damos pequeños pasos, uno a la vez.
Podemos comenzar nuestro acercamiento a través de la música; por ejemplo, la cantante Taylor Swift al componer se inspira en varios poetas como Pablo Neruda y Sylvia Plath. Además, en su último álbum《The Tortured Poets Department》utiliza estructuras poéticas en sus canciones, permitiendo también la multiplicidad de lecturas en sus letras. La música es tan importante que en 2016 Bob Dylan recibió el premio Nobel de literatura por haber "creado nuevas formas poéticas de expresión dentro de la gran tradición de la canción estadounidense", juzgó el jurado.
Para continuar este tránsito hacia la poesía te recomiendo leer novelas “más poéticas” como《Seda》de A. Baricco,《El cortador de cañas》de J. Tanizaki o《Autorretrato》de C. Paul, donde la introspección y la descripción de los lugares evocan sentimientos increíbles acercándote a la poesía. Si con esos textos ya estás a gusto comienza entonces con pequeños poemas como los Haiku, breves rimas japonesas, que en general se caracterizan por nombrar elementos de la naturaleza que están presentes en una estación del año.
Una vez que ya hayas transitado estos pasos, te invitamos a leer algunos de nuestros poetas favoritos como Wislawa Szymborska o Emily Dickinson. En ellos podrás comenzar a disfrutar la belleza de las palabras y sentirlas en tu alma.
