Las transformaciones operadas en las fuentes del derecho en las últimas cuatro décadas, y que han dado lugar a la era del derecho neomoderno, están en la base de los contenidos de esta publicación. Ellas se han dado a la par de una dinámica de afianzamiento de los principios democráticos y de renovación constante del concepto de ley, y han tenido claras implicancias en las fuentes del derecho: las leyes, la doctrina y la jurisprudencia, así como en los usos y costumbres de la sociedad devenidos en nuevos principios que moldean tales fuentes. A este fenómeno apunta este libro, el quinto de una serie sobre la identidad y las transformaciones del derecho.
En estas páginas, mediante breves artículos de doctrina o comentarios a decisiones legales o jurisprudenciales, el autor expone el perfil del derecho neomoderno y sus expresiones. En ese marco, destaca el rol del jurista, como observador social y también como generador de ciencia jurídica, en la discusión de muy diversas materias de relevancia pública. Se sitúan allí –entre muchas otras materias– la debida atención a las fuentes del derecho democrático, el resguardo de la corrección en los procesos legislativos, la atención a la jurisprudencia y a los principios que ésta crea, la conducta de los juristas en una sociedad democrática y el fomento a una sana circulación de ideas en los debates jurídicos. En ese marco, este libro se inscribe como un aporte relevante a la comprensión de los nuevos paradigmas jurídicos.