Un libro muy apetitoso: Bill Buford viaja a Lyon y se sumerge
en los secretos de la cocina francesa.
Nada de limitarse a leer un montón de recetarios y entrevistar a unos
cuantos cocineros. No. A Bill Buford, un chef de Washington le
muestra el camino: si quiere escribir un libro sobre cocina francesa,
debe ir su epicentro: la ciudad de Lyon, el auténtico corazón de la
cuisine française y reino de su sumo pontífice, Paul Bocusse. De
modo que hace las maletas y se lleva a su mujer y a sus dos hijas
gemelas a Lyon. Allí estudia en L’Institut Paul Bocusse; logra ser
aceptado como aprendiz en un estrella Michelin y se somete a una
disciplina casi militar (o acaso sobra el casi). Por el camino, se hace
amigo de un panadero excelso, asiste a una matanza del cerdo –una
auténtica carnicería–, descubre productos locales, técnicas de cocina
y el duro camino del cocinero francés que, a tenor de lo que cuenta,
resulta ser casi tan bestia como el del samurái.
Anagrama
Bill Buford
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