En marzo el diario El País publicó la columna ¿Puede una escritora ser una estrella de rock?, donde se habla sobre las estrategias utilizadas por Editorial Anagrama en Barcelona y Madrid, para el lanzamiento de Un lugar soleado para gente sombría de Mariana Enriquez. Al leer la columna me quedó una interrogante rondando en mi mente ¿Cómo un lector elige su próxima lectura?
La pregunta surge en gran medida porque mes a mes las librerías se repletan de nuevos títulos, siendo abrumante para un lector elegir ese nuevo libro. Es por lo mismo que instancias como los lanzamientos, muchas veces se convierten en una excelente vitrina para los lectores curiosos, quienes pueden experimentar una probadita del libro; lo malo, solo una pequeña fracción de los nuevos libros tienen esta instancia.
Foto: Editorial Anagrama
La respuesta para la pregunta inicial es casi siempre de selección múltiple dependiendo del lector, es que en un mundo tan globalizado como el actual los canales para recibir recomendaciones de títulos para leer se han multiplicado. Aunque hay cosas que siguen mas o menos igual, por ejemplo, el boca a boca sigue siendo una de las principales formas usadas para elegir una lectura. En mi experiencia como librera, los títulos El verano que mi madre tuvo los ojos verdes de Tatiana Tibuleac o La trenza de Laetita Colombani se venden porque una amiga/tía/hermana los recomendó, lo que tiene completa lógica, porque cuando tenemos un cercano que resulta ser buen lector o con gustos a fines, confiamos a ciega en su criterio.
Sin embargo, en la época digital con plataformas como Tiktok, Instagram o Goodreads, muchos lectores se han animado a compartir sus reseñas y experiencias lectoras sin necesariamente ser influencer, lo que sin duda ha repercutido en la elección de títulos en los lectores, sobre todo en los más jóvenes. El mar de reseñas en internet nos permite comparar opiniones, encontrar visiones cercanas a las nuestras y crear una sensación de seguridad al aventurarse con un libro. Eso es algo que ha experimentado el libro Alas de Sangre de Rebecca Yaros y su continuación, su éxito se basa en decenas de lectores felices con su lectura y que no tienen miedo en dar su opinión en la red social de su preferencia.
Los lectores más audaces llegan a una librería sin nada en mente, algunos se dejan sorprender por las contratapas y otros por la portada, lo que no deja de ser similar a un salto de fe, porque el lector se arriesgas a una primera impresión, y muchas veces saldrá ganando, porque suelen ser lecturas sin expectativas creadas. Para los lectores menos audaces, sin algo en mente, una opción siempre será su librero, puede que te cueste pedir ayuda las primeras veces, pero al compartir tus gustos y últimas lecturas favoritas, tu librero se puede sumergir en las profundidades de estantes buscando ese libro para ti.
Aunque el mundo del libro a veces parezca renovarse a la misma velocidad del fast fashion, siempre hay una forma de encontrar algo para leer, a medida que vayas sociabilizando más y más tus gustos, ya sea por medio de redes sociales, conversaciones con cercanos o visitando habitualmente tu librería favorita se hará más fácil decidir tú próximo libro, lo importante es estar dispuestos al riesgo, el intercalar autores que amemos con nuevos escritores o editoriales, mezclar propuesta, porque así día a día nuestro repertorio de posibles libros aumentará y también se te hará más fácil elegir.
