Con la ironía intacta, con la inocencia del niño, con el compromiso del militante, que es signo fundante de sus textos, Mario Benedetti sabe hacer la defensa de la lectura placentera. Entre los 60 poemas y las 85 bagatelas hay gestos para la emoción, la furia, la tristeza y la esperanzadora luz del mañana. Defensa propia es el testamento poético de un hombre cuyo oficio ha sido defender siempre la palabra. En diferentes lenguajes -poesía o bagatela- la impronta lírica, la capacidad de asombro, el ineludible paso del tiempo, la imagen instantánea y reveladora nos atraviesa como un rayo.