Monza, Italia, 1936. Francesca, de trece años, yace a orillas del río Lambro bajo el peso de un hombre que intentaba violarla cuando falleció de súbito. Maddalena se arrastra desde el agua y la ayuda a zafarse del cuerpo, que esconden entre unos arbustos. La amistad entre las dos niñas comenzó un año antes, y está marcada por la búsqueda de libertad más allá de la rígida jerarquía social del pueblo. A Maddalena, de orígenes humildes, la llaman "la malnacida" por sus supuestos poderes oscuros. Su vínculo superará las malas lenguas del pueblo, que culpan a Maddalena de varias muertes, pero será
puesto a prueba por la guerra, y las dos amigas tendrán que decidir si aliarse en contra de la opresión social o dejar que el curso de la historia las separe para siempre.