Si los peores pronósticos se cumpliesen, en 2050 el peso del plástico en los océanos superaría al de los propios peces; no en vano, se calcula que unos 8 millones de toneladas de ese material -del cual la mitad es de un solo uso- acaban cada año en el ecosistema marino. Este libro es una guía que presenta la ficha científica de esa “especie invasora” que urge erradicar. La autora y promotora del proyecto «Plasticus maritimus», Ana Pêgo, creció junto a una playa, observando, aprendiendo y apreciando su biodiversidad, forjando la activista en la que se ha convertido como beachcomber en una red internacional de expertos que ayudan a identificar los plásticos que se recogen en las aguas y los arenales. Desde los microplásticos de menos de 5 mm. que se introducen en la cadena trófica, hasta los objetos en los que queda atrapada la fauna marina o intoxicada por su ingesta, esta obra alerta sobre un tipo de contaminación galopante que incluso ha formado su propia isla en el Pacífico.