Este discurso de Andrés Bello, pronunciado en 1843, es el acta de fundación de la Universidad de Chile y uno de los textos fundamentales de la historia de nuestra república. En este manifiesto universitario, de uno de nuestros «padres de la patria», encontramos una reflexión rigurosa y profunda sobre la esencia de la universidad y sobre la importancia capital que tienen para el desarrollo de una sociedad el cultivo de las ciencias y las letras. Este es un documento clave para entender la filosofía política y el proyecto cultural de ese humanista excepcional que fue Andrés Bello. Pero también es un texto de gran actualidad, pues nos invita a repensar el sentido de la educación. Al leerlo nos damos cuenta de cuán lejos estamos hoy como país del sueño de Bello, en el que la cultura intelectual, el aprecio por los clásicos, el pensamiento, el arte y la ciencia son los pilares de una universidad y una sociedad que aspiren a la Libertad, en su sentido no reductivo sino esencial.