Fake News. A pesar de estar tan en boga en nuestros días, Shakespeare ya era consciente de la utilidad de este recurso a la hora de destruir destinos y por ello lo empleó como una de... Leer másFake News. A pesar de estar tan en boga en nuestros días, Shakespeare ya era consciente de la utilidad de este recurso a la hora de destruir destinos y por ello lo empleó como una de las «estrategias del mal» con las que Yago se vengaría de Otelo, y que lo convertirían en el antagonista más despiadado. No en vano rivaliza en importancia con Ricardo III.Harold Bloom analiza la figura de un Yago resentido y envidioso, dolido por no obtener el ascenso del que se creía merecedor. Lo define como «un pirómano que quiere prender fuego a todo y a todos». Sus deseos de venganza no conocen límites y su perseverancia y astucia lo llevarán a desarrollar una serie de estratagemas que en nuestros días se han convertido en mandamientos del maligno arte de la manipulación.