Las coéforas, representada el año 458 a. C. en Atenas, es la segunda de las tragedias que componen la trilogía Orestíada. Toma su título del coro de sirvientas que acuden a dejar ofrendas en la tumba del rey Agamemnón, asesinado por su mujer Clitemnestra, ha vuelto del extranjero para vengar el crimen. Se reúne con su hermana Electra y juntos invocan la ayuda del padre difunto. Orestes mata entonces a Egisto y a su madre, y luego huye deshecho por la culpa y acosado por las Furias, aquellas deidades que en la mitología griega castigaban duramente el asesinato de un familiar, con independencia de la razón que lo haya motivado.
Esta obra fundamental de la literatura griega se ofrece aquí traducida en verso por el eminente humanista chileno Juan Rafel Salas Errázuriz. Publicada originalmente en 1904, fue celebrada tanto por Marcelino Menéndez Pelayo como por Miguel de Unamuno, quien en sus clases usaba precisamente esta traducción por considerarla "insuperable".