«La justicia podría ser un sueño, pero de esos que regresan una y otra vez y se resisten al olvido», nos dice Agustín Squella en este ensayo dedicado a una palabra que se ha alzado históricamente como virtud y en nombre de la cual se han construido nobles utopías y librado batallas sangrientas. Pero ¿de qué hablamos cuando hablamos de «justicia»? ¿Cómo asir una palabra a la vez tan vaga e imperiosa? Tras la exploración que el autor ha dedicado ya a los conceptos de «libertad», «igualdad», «fraternidad», «democracia», «desobediencia», «derechos humanos» y «dignidad», en esta ocasión nos ofrece una lúcida reflexión sobre la justicia en sus varias vertientes: la personal y social, la de carácter institucional y político, la que se alza como fin del derecho, la que genera expectativas en los integrantes de una nación y motiva la organización de un orden global. Squella, con perspectiva histórica y en nutrido diálogo con pensadores y autores de diferentes tiempos y disciplinas, nos propone diversas vías para adentrarnos en la justicia y dilucidar por qué «la esperamos, la practicamos, la buscamos, la echamos de menos, y en cada una de esas acciones, deseos y sentimientos sabemos que se trata de algo importante».