En la literatura chilena de este siglo, la figura de Teresa Wilms Montt (1893-1921) constituye un caso excepcional. Su obra -poemas y narraciones- es prácticamente desconocida, a pesar de su indudable valor. Su vida, un apasionante y trágico itinerario. De origen aristocrático, Teresa rompe con todos los prejuicios sociales de la época para intentar alcanzar una plenitud de vida y la total realización literaria. Pero las convenciones de comienzos del siglo pasado le cobran caro sus propósitos. Casada a los diecisiete años, al poco tiempo se enamora de quien no debe. La castigan con el enclaustramiento en un convento. Separada definitivamente de sus dos hijas y acompañada de Vicente Huidobro parte a Buenos Aires. Por su excepcional belleza e inquieta inteligencia es acogida con entusiasmo en los círculos intelectuales y en las bohemias bonaerense y madrileña. Nunca más regresará a Chile.