Nicanor Molinare es uno de los grandes cronistas de la época, pero además participó de la Guerra del Pacífico como oficial en la Brigada La Recoleta, para luego ser transferido al Batallón Curicó. A partir de ello, realizó esta ardua investigación, que fue publicada por El Diario Ilustrado el año 1912, y que nunca había sido publicada como libro.
El Combate de La Concepción es el único en el cual no sobrevivió ningún uniformado chileno que pudiera relatar los hechos. Las fuentes directas que se pudieron utilizar fueron los propios habitantes del pueblo, los partes oficiales y las narraciones de los soldados peruanos. Debido a esto, la labor de reconstrucción histórica que realiza Molinare es notable. En este libro, por ejemplo, es posible encontrar testimonios de testigos oculares, como un ciudadano español y otro italiano.
Los editores de esta obra, Mauricio Pelayo González y Rafael Mellafe Maturana, desarrollaron una exhaustiva labor que consistió en establecer la precisión de las fechas o verificar el origen de los datos. Además, se incluyen en el libro un diagrama táctico del Combate de La Concepción; la nómina de oficiales, clases y soldados muertos en ese hecho de armas; una carta de Luis Cruz Martínez a su madre; un parte del coronel Estalisnao del Canto sobre el combate; una carta inventario de equipajes de oficiales muertos en el combate; correspondencia detallada y cartas sobre La Concepción; el discurso pronunciado por el presbítero Clovis Montero, con ocasión del traslado de los corazones de los héroes de La Concepción.
Nicanor Molinare publicó, entre otros, los siguientes libros: Historia de la Batalla de Huamachuco: martes 10 de julio de 1883, Asalto y toma de Pisagua: 2 de noviembre de 1879, La expedición a Lima: Batallas de Chorrillos y Miraflores, Batalla de Tarapacá: 27 noviembre de 1879.